Introducción
Los avances en estos últimos años llevados a cabo por diferentes instituciones de investigación, académicas y expertos independientes, así como el surgimiento de un nuevas formas de pensamiento, como es por ejemplo, la puesta en práctica de los principios que inspiran la economía circular, están provocando la necesidad de una adaptación constante en nuestras estructuras de los sistemas de construcción y de energía que son clave para un adecuado desarrollo urbano.
En este desarrollo urbano, debido principalmente a los problemas ambientales, ecológicos y energéticos, la preservación y conservación de la naturaleza, el desarrollo de fuentes renovables y el pensamiento sistémico de todos los actores que forman parte del desarrollo son fundamentales para crear las condiciones de un sistema eficaz, sostenible e inclusivo.
En un análisis general de la situación en estas áreas de actuación con el fin de que edificaciones sean re-silentes, es decir, capaces de recuperarse de los deterioros que han sufrido por los efectos negativos de los sistema de desarrollo, el concepto de eficiencia energética así como los sistemas de construcción requiere de un cambio radical que aporte innovaciones en esta dirección.
Como decía nuestro amigo común Adriano Trimboli “Los diferentes materiales utilizados actualmente para la construcción, así como los procedimientos de extracción de materias primas, conllevan un alto costo de energía y transporte, que además de emitir polvo sutil y emisiones de CO2 a la atmósfera, deterioran enormemente el medio natural, en el que se incluyen la fauna y la flora”.
Conocemos que los edificios son los responsables de más del 40% del consumo energético, así como del 30% de las emisiones de C02 en la UE. A su vez, somos conscientes de que las ciudades tienen que utilizar los principios que inspiran la economía circular, como alternativa al sistema tradi cional de “producir, utilizar y tirar” para que los materiales duren el mayor tiempo posible y podamos recuperar y reciclarlos al final de su vida útil.
Sabemos también que las ciudades tienen que hacer uso de las posibilidades que ofrecen las TIC para su integración en las estructuras de los sistemas de construcción, de forma que optimicen y ofrezcan resultados positivos a favor de la eficiencia ambiental de los edificios.
Ahora bien, el urbanismo que forma parte de las ciudades también tiene que ser sostenible desde otros ámbitos de actuación si queremos crear las condiciones para el desarrollo de ciudades sostenibles, inteligentes e inclusivas en una clara determinación como alternativa a los sistemas tradicionales para que los materiales duren el mayor tiempo posible y podamos recuperar y reciclarlos al final de su vida útil.
En este contexto un tanto estratégico, de deseo y de un cambio profundo en nuestra forma de construir edificios sostenibles, inclusivos, tomamos la idea del científico Adriano Trimboli de que los edificios deben comportarse como si de un ser vivo se tratara aplicando los principios de la termodinámica en las edificaciones. De ahí, que las edificaciones tienen que ser capaces de despertar emociones no sólo energéticas y ecológicas sino también las relacionadas con el bienestar y la salud, donde las tecnologías emergentes están jugando un papel trascendental.
Hoy tenemos el placer de presentar la sección del Grupo de Trabajo -OSICO- sobre “Sistemas de Construcción y Energía” donde una serie de expertos en la materia nos mostrarán sus conocimientos e investigaciones llevadas a cabo a lo largo de su vida en éstas áreas de actuación
Para comenzar esta sección tenemos el honor de presentar en el día de hoy a D. Jesús María Rincón López, Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid, científico del CSIC y miembro honorífico de la “UMH-Elche”, que ha dedicado toda su vida profesional a la investigación científica y técnica en el campo de los Materiales Cerámicos y Vítreos, y que ha sido reconocido por sus publicaciones en revistas científicas de prestigio y colaboraciones en proyectos internacionales.
Jesús M.ª Rincón López
Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid y actualmente científico honorífico de la UMH-Elche, ha sido durante 52 años científico del CSIC y por concurso oposición fue nombrado desde el 2000, Profesor de Investigación en este puesto el más alto de la carrera científica en España. Ha dedicado toda su vida profesional a la investigación científica y técnica en el campo de los Materiales Cerámicos y Vítreos. Ha sido pionero en España de la investigación en materiales Vitrocerámicos, así como en la aplicación de las técnicas de Microscopía Electrónica y Microanálisis en estos materiales y en continua colaboración con las empresas del sector, fundamentalmente con el “clúster cerámico” de Castellón. Internacionalmente está reconocido por sus publicaciones en revistas científicas de prestigio y colaboraciones en proyectos internacionales, así como de la Unión Europea. Por ello, actualmente tiene un índice H= 32 de audiencia científica internacional, estando en el puesto 8º en el ranking de 17 científicos españoles en su área de investigación con mayor índice de impacto. Además, ha sido presidente de la Asociación Española de Científicos entre 2012-2017, anteriormente fue secretario general de la Soc. Española de Cerámica y Cristal en el período 1988-92 y editor del Boletín BSECV.
Insignia de oro y brillantes del Colegio de Químicos y ANQUE de Madrid en el 2015 y Socio de Honor de la SECV desde 1992. Actualmente sigue activo: divulgando, asesorando, en tribunales de tesis, en lecciones de master y como conferenciante invitado en temas de vidrios, cerámicos, sus materias primas, microscopía electrónica y métodos térmicos y ayudando (“coach”) a la carrera profesional de científicos jóvenes, lo mismo que aportando su experiencia personal de más de cincuenta años, allí donde se le demande, sobre las relaciones entre Ciencia-Sociedad-Empresa.
El artículo de aportación de conocimiento a la Plataforma -OSICO- que bajo el título: “Funcionalidades del vidrio y el misterio de su estructura por microscopia electrónica” lo hace coincidiendo con motivo del “Año Internacional del Vidrio” de Naciones Unidas a propuesta del “International Commission on Glass” que aglutina a más de 5.000 investigadores, empresas y otros actores dedicados profesionalmente a este sector.