El derecho a la privacidad y a la protección de los datos personales es un derecho ampliamente reconocido por diferentes organismos internacionales, tales como la UE y la ONU, entre otros, que tratan de llevar dichos derechos al ámbito de internet.
Hay que promover y proteger el derecho a la libertad de opinión y de expresión. El cifrado y el anonimato, tanto junto como separado, puede ser útil para proteger las opiniones y las creencias. Esto hace que numerosos países reclamen el acceso a las comunicaciones encriptados, un derecho indispensable especialmente en entornos políticos, sociales, religiosos o legales. El encriptado garantiza la privacidad de los mensajes enviados, ya que sólo permite el acceso a su contenido a los destinatarios, evitando que otras personas, entidades u organizaciones espíen las comunicaciones. A esto se unen voces discordantes en torno a la posibilidad de romper este derecho por la comisión de hechos delictivos, donde las empresas tecnológicas permitan el acceso a la información en aras a la seguridad.
Así, las normas por ejemplo de la UE sobre protección de datos personales y privacidad en las comunicaciones electrónicas abarcan la comunicación por internet, como el acceso a internet, y la comunicación a través de las redes de telefonía móvil y fija. Este Reglamento de Protección de Datos pretende, por un lado, devolver a los ciudadanos el control sobre sus datos personales en un mundo dominado por los teléfonos inteligentes y las redes sociales y donde la banca por Internet y el comercio online están a la orden del día. Por otro lado, también se pretende mejorar la seguridad en cuanto a la legislación para las empresas que operan dentro de la Unión Europea, con el fin de impulsar la innovación y el desarrollo futuro del mercado único digital.
La principal novedad introducida por el Reglamento de Datos es la unificación de todas las leyes de la UE en materia de privacidad y protección de datos, así como el derecho al “olvido”, en donde en determinados casos, se tiene el derecho a pedir a los responsables del tratamiento que corrijan, supriman o bloqueen datos sobre ti mismo, todo ello adaptado a la nueva era digital. La protección de este derecho fundamental ha sufrido últimamente algunas consideraciones como consecuencia de los ataques terroristas en todo el mundo, que ha planteado un nuevo reto: a que damos más valor a la privacidad o a la seguridad, cuestión que debemos valorar en su justa medida.
José Esteban Gabarda Balaguer se ha desempeñado como Director de una Agencia de Desarrollo, destacándose por su liderazgo con visión estratégica. Como fundador y director de la Plataforma OSICO, impulsa un espacio innovador para el análisis y la colaboración frente a los principales desafíos sociales. Su enfoque integra la inteligencia colectiva, el pensamiento circular y sistémico, junto con la innovación social, como herramientas para promover un desarrollo sostenible y equitativo. Es Licenciado en Derecho y Doctor en Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense de Madrid.




